Alias: Taiga, Señor fragmentado, El experimentador
Edad: Maduro
Estilo: Hechicero agresivo
Colores: Todos
Principales rasgos:
- Autodidacta.
- No sigue a nadie en especial.
- Ganador de 10 EPU de Malil.
- Señor fragmentado consolidado.
- Suele apoyarse en sus criaturas fragmentadas.
- Se dice que experimenta más allá con otras criaturas y camina en otros planos.
- Vive solo, salvo con sus creaciones.
- Explosivo pero calculador.
- Tenaz, duro y sorprendente.
Taiga Laira nació en un bastión desconocido bajo la tutela del señor Pirra, su padre.
Cuando una furiosa carga de dragones de fuego atacó la fortaleza donde residia junto a su familia, Taiga huyó y se refugió en casa de un científico exiliado por su padre.
Al paso de los años, Taiga encontró un nuevo padre en él y ambos empezaron a experimentar más allá de las formas físicas y se adentraron en los misterios que surgieron en Malil. Ahondaron en porqué la magia se empezó a manifestar aqui y encontraron respuesta en Rávnica, ciudad de gremios.
Por desgracia, Chandra Nalaar fulminó al maestro de Taiga por una vieja rencilla con él. Llorando de rabia y con el cuerpo de su maestro incinerado en sus brazos, Taiga juró que acabaría con la maestra piromante.
Encerrandose en el laboratorio que compartía con su maestro probó a crear nuevas criaturas adaptativas entre sí formando una nueva saga de fragmentados. Estas criaturas por si solas no servían de mucha ayuda, pero apareciendo varias a la vez se conseguían gratos poderes del gusto de Taiga y sus ansias de batalla.
Un fortuito encontronazo con Keitaro, avivó sus ansias por dominar a los hechiceros que se cruzasen en su camino. Sus batallas aumentaron en dureza y cada vez eran más disputadas.
En medio de un EPU (el que finalmente ganaría) acabó malherido en su brazo izquierdo y se introdujo un vestigio fragmentado para aumentar la capacidad de sinergia con sus criaturas construidas. Y dió, gracias a los Azorios y sus archivos, con un artefacto que aumentaría su capacidad de invocación. Por desgracia, no le advirtieron que su uso podría acabar por convertirlo en un ente híbrido y que, algún día, perdería su humanidad.
No se ha suscrito a ningún gremio pero tiene contacto con todos ellos y varios espías han observado que camina por los planos de Theros (entre otros) a la busca de más fragmentados creados por distintos seres. Y encontrar algún día a la Reina Fragmentada...